El secreto de este mar y porque se ha convertido en uno de los destinos preferidos del charter y del velero particular radica en su meteorología.
El verano es estable en esta parte del Mediterráneo, aunque sus inviernos son lluviosos, lo cual no está del todo mal pues da lugar a una vejetación abundante y a unos paisajes soberbios.
Hay algo mas delicioso que amarrar en una playa con olivos, rodeada de un bosque de cipreses, y carrascas. O las islas de pinos como Kalamos.