Creta es una isla que, por si sola se merece un tiempo largo para recorrerla. Su música, sus ciudades , sus tradiciones, tienen personalidad propia.
Con una historia milenaria, Creta atrae a los amantes de leyendas, ávidos por descubrir esta isla que goza de magníficas playas de arena acompañada de una dulce atmósfera mediterránea. Punto de cruce entre Oriente, Occidente y África, la isla fue en todas las épocas la presa de muchos conquistadores, que dejaron su huella propia y la de sus culturas. Bizantinos, venecianos y otomanos desarrollaron una arquitectura específica de la que las principales ciudades de la isla se hacen eco hoy en día, aunque no te harán olvidar la increíble riqueza de su pasado milenario bajo la influencia de la Grecia antigua en general y de la civilización minoica en particular.
Chania, también llamada Hania o Xania, es la segunda ciudad más poblada de Creta. La zona turística vive alrededor de un precioso puerto veneciano amurallado rodeado por una red de callejuelas con un ambiente encantador.
Chania tiene un espléndido pasado griego, veneciano y turco. Paseando por la ciudad te encuentras con una pintoresca arquitectura en la que se mezclan restos de las fortalezas venecianas, mezquitas e iglesias ortodoxas. Todo esto aderezado con el típico carácter y colorido griego hace que sea una de las ciudades más embriagadoras que hemos visitado nunca.
Al parecer, hay indicios de que la ciudad lleva habitada desde el Neolítico, y de que bajo ella se encuentran las ruinas de la ciudad minoica de Cydonia.