La historia de la isla de Psara es una historia de resistencia y lucha contra la dominación turca. La isla, por otro lado, es un paraiso para los barcos.
En el mar Egeo, 48 millas al noroeste de Chios, hay un grupo de siete islas la mayor de las cuales es Psara. Las demás son Antipsara, actualmente deshabitada, Kao Nisi, Aye Nikolaki, Daskalio, Prasonisi y Nisopoula. En conjunto, son el lugar ideal para disfrutar de paz, tranquilidad y descanso, puesto que no hay ni siquiera coches. Además, los vecinos son realmente amables con los visitantes.
El terreno de Psara es rocoso, lleno de montes y colinas, la mayor de las cuales es Prophitis Ilias con 640 metros de altura. En sus 39 kilómetros cuadrados, hay tan solo un pueblo y su puerto, debido a las características del terreno. La mayoría de sus 500 habitantes se dedican a actividades marítimas, estando el sector del turismo poco desarrollado.
Durante la Edad Media la isla estuvo deshabitada. Algunas familias griegas de Thessaly y de otras islas se establecieron en Psara durante los siglos XV y XVI huyendo de los ataques turcos. Más tarde, Psara se convertiría en la tercera fuerza de comercio marítimo, después de las islas de Hydra y Spetses.
Durante la revolución de 1821 contra el Imperio Turco, los habitantes de Psara participaron con su armada y quemaron varios barcos turcos bajo la orden de valientes capitanes como Papanikolis, Kanaris y Pipinos. Sin embargo, a pesar de su heroica resistencia, Psara sufrió la venganza y la ira de los turcos, que destruyeron la isla por completo, matando o capturando a toda la población el 24 de junio de 1824.
Los pocos vecinos que lograron escapar de la isla en barco buscaron refugio en Monemvassia (Peloponés) y, después de la liberación de Grecia, se trasladaron a Ereria (Evoia) donde construyeron la «Nueva Psara». Muchos de ellos volvieron más tarde a Psara y han vivido allí hasta hoy.
Durante el primer siglo tras la liberación de Grecia, Psara tuvo el privilegio de contar con dos miembros en el Parlamento como reconocimiento de su lucha por la libertad y la democracia. Desde 1946, Psara ya no goza de este privilegio; sin embargo, para honrar a la historia de la isla, Psara sigue siendo un municipio a pesar de su tamaño.
Algunos de los atractivos más interesantes de estas islas son el Museo Arqueólogico, la iglesia de Aghios Nikolaos (desde donde Constantine Kanaris inició su ataque al buque insignia turco) y las vistas desde la iglesia y el monasterio de la Asunción de la Virgen María y su excepcional biblioteca con volúmenes únicos. Por supuesto, la cocina griega también debería formar parte de cualquier programa que se precie, especialmente los platos típicos de la isla: la langosta, la miel, y el queso.