Siempre me ha gustado leer sobre el diseño de los barcos de vela a lo largo de la historia. Uno de esos diseños famosos es el barco de los vikingos: el Drakkar.
Los navegantes nórdicos, enfrentados con las furias de viento y el oleaje de las mareas invernales , construyeron sus barcos de acuerdo con sus necesidades. El diseño del Drakkar era básicamente un casco robusto y alargado capaz de cortar las terribles olas que azotaban los mares del Norte. Los barcos destinados a la guerra eran llamados genéricamente como herskips o «guerreros» e individualmente Drekis o » serpientes «. Se hallaban impulsadospor remeros cuyo número oscilaba en función del tamaño de barco. Cada uno de los orificios de los remos podían taponarse con un disco de madera para evitar, cuando sólo se usaba la vela, que entrase el agua por ellos. A los costados solían colgarse escudos coloreados que eran el emblema de los guerreros embarcados. Se ayudaban en la navegación empleando una vela cuadrada que se izaba sobre un mástil abatible. A modo de timones llevaba dos grandes remos situados en las aletas del casco. Para hacernos una idea del desarrollo que alcanzaron estos buques, basta citar dos ejemplos. El primero es el Ormrinn Langi o Larga Serpiente que fue construido durante el reinado de Olaf. Medía 60 metros de eslora, 13 metros demanga y la roda y el codaste se alzaban 5 metros sobre el agua, con una tripulación de 700 hombres. El segundo es el Gran Dragón construido en el Reinado de Canuto el Grande. Medía 100 metros de eslora. Empleaba la fuerza de 120 remeros y su tripulación total era de unos 1.000 hombres. Los vikingos también desarrollaron una especie de «navío acorazado» denominado Jarnbardi.Era una embarcación grande y alargada, reforzada en su línea de flotación por planchas de hierro, y con un poderoso espolón, también de hierro, en la proa.