Situada en la parte más occidental de Grecia, se ve influenciada por su posición en el mapa y su orografía, situándose su valor de precipitación total en los 1083 mm anuales, pero se ha de tener en cuenta que esta cantidad se concentra en 83 días, la mayoría de ellos en noviembre, ya que es en este mes cuando la precipitación es máxima (181 mm de precipitación en noviembre). Contrariamente, el mes de julio es el que muestra una precipitación más escasa; con sólo 7 mm es el mes que presenta el mínimo pluviométrico.
Basándonos en la precipitación total anual se puede afirmar que este es un clima húmedo, pues la recogida de lluvia se encuentra en el intervalo 1000 – 2000 mm. De todas formas, teniendo en cuenta que en muchas islas vecinas el clima es bastante más seco, y que el total anual en este caso está bastante cerca del límite de lo que se calificaría como clima semihúmedo (500 – 1000 mm), podríamos incluir que, dependiendo del año este clima puede considerarse como semihúmedo, ya que si las precipitaciones descendieran en en poco más de 80 mm entraría en el baremo de éste.
Respecto a la temperatura, la más alta del año se alcanza en agosto, con un registro de 31,1 ºC y una media mensual de 26,4 ºC, casi igual que en julio, mes que presenta las más escasas precipitaciones del año. Por su parte, el mes más frío no coincide con el mes más lluvioso, la temperatura más baja registrada se encuentra en pleno invierno, en el mes de enero (con 5,1 ºC). Por lo tanto, si calculamos la diferencia entre las medias mensuales más calurosas y frías obtenemos una amplitud térmica en Corfú de 19,6 ºC. Mientras que la oscilación térmica máxima es de 26 ºC (cuando hacemos la diferencia entre el valor más frío y el más caliente del año).
La Isla de Corfú se encuentra en una latitud de 39º 37′ Norte, por lo que su insolación máxima corresponde al mes de julio (11,8 horas diarias), hecho que corresponde con uno de los meses más calurosos así como el menos lluvioso. Finalmente, diciembre es el mes que presenta una insolación menor.
